Pensión de Alimentos
Escuchar este artículo ahora
Getting your Trinity Audio player ready...
|
Pensión de alimentos. Son tiempos de cambio, al menos económicos, esta crisis esta obligando a llevar a acabo ajustes en muchos sectores, el gobierno recorta gastos y oprime a empresas y ciudadanos, las empresas ajustan los suyos y aprietan a proveedores y trabajadores, el ciudadano se angustia y reduce el consumo. Son muchos los que en estos tiempo han visto como se han rebajado su ingresos, recortes de salarios, autónomos que venden menos, personas sin trabajo que cobran prestaciones por desempleo, ayudas o, en el peor de los casos, sin ingreso alguno. En este entorno hay personas que obligadas por una Sentencia o resolución judicial han de hacer frente cada mes al pago de una pensión de alimentos a favor de sus hijos o compensatoria a su cónyuge, y sin embargo las actuales circunstancias hacen que, aunque quieran, les sea imposible abonar las cuantías impuestas.
Por la práctica sabemos que muchos, no pudiendo hacer frente al pago, o dejan de hacerlo o reducen unilateralmente el importe a pagar, sin embargo esto conlleva el ir acumulando una deuda, con posible embargo de bienes, y en algunos casos incluso a ver como son imputados por un delito de abandono de familia. Sin embargo la ley permite que si se produce una alteración sustancial de las circunstancias tenidas en cuenta al acordar la cuantía de la pensión, ésta pueda ser modificada. Las partes pueden de común acuerdo o sólo el obligado, si no hay consenso, solicitar al Juez la modificación del importe de la pensión.
Por lo tanto lo aconsejable es interponer un procedimiento de modificación de medidas. Para que tal petición sea concedida será necesario acreditar esa variación de las circunstancias, y que ésta sea sustancial, será el juez quien valore en cada caso si se dan o no esta alteración, pero a título de ejemplo dejemos sentado que no basta una simple disminución de ingresos, habrá que demostrar que se trata de una reducción significativa de tal forma que impide cumplir con la cantidad acordada. Además, la merma de los ingresos no debe ser provisional, por un tiempo determinado, habrá que acreditar que va a ser una situación duradera. Tampoco debe tratarse de una situación buscada por el propio obligado al pago, no todo vale, no parece lícito aprovecharse de la crisis para buscar una rebaja en la pensión, debe de tratarse de una situación real, recordemos que la pensión de alimentos tienen por destinatarios a los más indefensos de la familia.